El desarrollo de un data center submarino permitirá reducir el malgasto de energía que supone la refrigeración de los servidores, lo que implicará una nueva forma de almacenamiento de datos en la nube más sostenible.
Los centros de datos o data centers son salas de gran tamaño que suelen ser creados y mantenidos por grandes organizaciones para almacenar la información en la nube o vender o alquiler dicho almacenaje. Algunas de estas estructuras se ubican en lugares muy curiosos, como en una base de submarinos nazi (en Marsella) o el sótano de una catedral ortodoxa (en Helsinki); a esto se le suma ahora China, que quiere construir uno bajo el agua.
Los desarrolladores del centro de datos submarino de China explican que contará con la refrigeración natural del mar, lo que reducirá considerablemente el gasto enérgico que suponen estas salas de almacenamiento de datos. Para que lo entendamos los españoles, el consumo energético de la refrigeración convencional actual equivaldría al gasto de Valencia, que es la tercera ciudad más grande por número de habitantes de España. Por lo tanto, bajo el agua, se ahorraría parte de este malgasto.
El centro de datos submarino de China
Este ambicioso proyecto asiático podría marcar un antes y un después en aspectos de sostenibilidad de los data centers. Según aseguran, la estructura ocupará 68.000 metros cuadrados, es decir, cerca de siete hectáreas.
China calcula que, en el espacio que utilizarán para su data center, cabrán 100 unidades de almacenamiento de datos de 1.100 toneladas cada una. Cada unidad, dispone de unos 60.000 ordenadores de capacidad de procesamiento. Eso da lugar a que, en total, el centro será capaz de procesar el trabajo equivalente a 6 millones de PC si se instalan el centenar de unidades que se planean colocar.
Al estar edificado dentro del agua del mar, el centro de datos recurrirá a la refrigeración natural, lo que supondría eliminar hasta 122 millones de kilovatios por hora de consumo de energía. Este suele ser uno de los aspectos que más contamina, por lo que China está trabajando por un futuro más respetuoso con el medioambiente sin renunciar al gran avance tecnológico que se consigue gracias a estos servidores.